Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO | 19 abril 2024.

¿Igualdad en las empresas?

    La desigualdad entre hombres y mujeres es un hecho y una barrera que derribar. Desde CCOO, la herramienta que nos da la ley son los Planes de Igualdad, es decir una serie de medidas adaptadas a cada empresa después de hacer un diagnóstico de las desigualdades encontradas en ese centro de trabajo.

    10/01/2019. Patricia García Sánchez, responsable de Comunicación y EESS del Sector de la Administración Autonómica de FSC-CCOO y Eva Espeso González, secretaria de las Mujeres de Castilla y León de FSC-CCOO

    Desde el PSOE de Valladolid, junto a CCOO y UGT, se ha llevado a cabo la propuesta de que los ayuntamientos de la provincia, gobernados por ese mismo partido, se implanten medidas de igualdad, principalmente en el acceso y la promoción para cabildos de menos de 50 trabajadoras y trabajadores y planes de igualdad en los que trabaje más gente.

    Para nuestro sindicato era imprescindible que este proyecto partiera de base sólida, que era el compromiso y la creación de una comisión negociadora capaz de hacer un diagnóstico previo y fijar unos objetivos a través de las medidas adecuadas en cada caso, además de un seguimiento, y todo ello, fijado en un tiempo.

    Actualmente esperamos las conclusiones del PSOE sobre las propuestas a los distintos ayuntamientos, así como las respuestas al cuestionario que debían completar los cabildos con menos de 30 personas de plantilla. Para el sindicato era importante ya que hay una Ley de Contratos del Sector Público que pide que las empresas que contraten las administraciones públicas tengan su Plan de Igualdad cuando las propias instituciones. No los tienen y en muchos casos no se les espera.

    En lo concreto, en tu empresa se contempla que en la selección de personal se respete la igualdad real: si hay igualdad retributiva, si se ha hecho una valoración de los puestos de trabajo y hay una clasificación profesional adecuada, si hay un plan de formación y si este se adapta a las necesidades, si hay flexibilidad horaria o si en la evaluación de riesgos se ha tenido en cuenta la perspectiva de género o si hay un protocolo de acoso sexual o por razón de género. Quizá también necesites un Plan de Igualdad adaptado a tu centro de trabajo.